El Ford Sierra es un coche que levanta pasiones, solo hay que ver la cantidad de gente que se arremolina alrededor cuando aparece una unidad en algún evento. El “Serrucho” es uno de esos coches que marcaba la pauta a seguir nada más pisar el asfalto y su reemplazo, el Ford Mondeo, aunque acabó por estar más tiempo en el mercado y vender más unidades, no ha sido capaz de igualar su imagen.
Corría el año 1982 cuando la firma norteamericana presentaba el Sierra y dejaba a todo el mundo sorprendido. Era el sustituto del Ford Taunus y desde el primer momento, dejó a este totalmente anticuado, a este y a cualquier otro rival. El diseño del Ford Sierra era rompedor, muy futurista para la época por su frontal totalmente carenado –la entrada de aire para el radiador estaba bajo la matrícula– y relativamente afilado con faros integrados, unas superficies bastante lisas para mejorar la aerodinámica y unos volúmenes, curiosamente, bastante tradicionales.
La presentación del “Serrucho”, como cabría esperar, contó con sus detractores, era un diseño demasiado polarizador, lo suficientemente diferente como para no dejar a nadie indiferente. Sin embargo, aunque rompedor por diseño, el Ford Sierra era muy tradicional por técnica. De primeras, mantenía la propulsión en lugar de adoptar una tracción delantera, como hacían muchos rivales, y los motores, aunque de gran tamaño, rendían una potencia modesta, muy al estilo yankee. Al menos se desarrolló un equipo de suspensiones de tipo independiente para los dos ejes.
Una de las cosas que más llama la atención hoy día del Sierra, es la oferta de carrocerías. Estaba la carrocería de cinco puertas y el familiar, pero además, también se ofreció una carrocería de tres puertas de aspecto bastante dinámico, hasta deportivo se podía decir. Había pocos coches de su categoría que ofrecían tal número de opciones, y mucho menos, una de tres puertas con un talante tan marcadamente deportivo. Además, para más inri, había dos tipos de carrocerías de tres puertas, una con ventanas traseras convencionales y otra con una ventanilla lateral trasera partida en dos, una solución muy llamativa.
Hoy día llama poderosamente la atención la selección de motores que conformaba la gama. El acceso estaba formado por un claramente insuficiente propulsor de 1,3 litros y 60 CV, acompañado del V6 Cologne que con 2,3 litros, rendía tan solo 115 CV. El 2.0 de 105 CV aparecido algo más tarde parecía más lógico, tanto por cubicaje como por potencia, aunque si se quería un coche “redondo”, nada mejor que recurrir a los 150 CV del Sierra XR4 o bien, dar el salto al salvaje Sierra RS Cosworth con sus 204 CV, que con el tiempo pasaron a ser 220 CV.
En 1987 se sometió a un restyling y perdió parte de su encanto y de su imagen futurista, aunque supuso la aparición del Sapphire, la clásica carrocería sedán que no había estrenado todavía. En 1989 se volvió a retocar su imagen y ahora sí, se convirtió en un coche más tradicional, al menos en lo referente a su imagen.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".En Argentina se fabrico el sierra con motor 1.6
También con motores 2.3
Versiones Ghia, s, sx , coupé xr4 , Rural
La xr4 con 120 HP
Con un equipamiento que muchos autos en actualidad no poseen
Espada de medición de nivel de aceite electrónico
Indicador de lámpara quemada
ᴇʟ Fᴏʀᴅ Sɪᴇʀʀᴀ ᴇs ᴇʟ ᴄᴏᴄʜᴇ ᴅᴇʟ ᴅɪ́ᴀ, ᴅᴇ ʟᴀ sᴇᴍᴀɴᴀ, ᴅᴇʟ ᴍᴇs, ᴇʟ ᴀɴ̃ᴏ ʏ ʟᴀ ᴠɪᴅᴀ ᴇɴᴛᴇʀᴀ.
ᴠᴇʜɪ́ᴄᴜʟᴏ ᴄᴏɴғɪᴀʙʟᴇ, ᴄᴏɴғᴏʀᴛᴀʙʟᴇ ʏ ᴅᴇ ᴍᴜʏ ʙᴜᴇɴ ɢᴜsᴛᴏ.
ᴀɴ̃ᴏʀᴏ ʟᴀ ᴅᴇ́ᴄᴀᴅᴀ ᴅᴇ 1980, ᴄᴜᴀɴᴅᴏ ʜᴇ ᴅɪsғʀᴜᴛᴀᴅᴏ ᴅᴇ ᴛʀᴇᴍᴇɴᴅᴀ ᴍᴀ́ǫᴜɪɴᴀ.👍
El Ford Sierra es un coche que mueve masas allí donde se dejó ver. Un “maquinón” de los que ya no se hacen. Totalmente de acuerdo contigo.