La marca checa, integrada en el grupo Volkswagen desde hace tres décadas, acaba de presentar un nuevo concept, denominado Skoda Vision 7S. Se trata de un vehículo eléctrico de siete plazas, con cierto aspecto SUV, que plasma las líneas del nuevo lenguaje de diseño de la marca y ofrece algunas soluciones que se integrarán en los próximos modelos de la marca.
Este Skoda Vision 7S forma parte de la estrategia eléctrica de la marca, que pretende que el 70 % de sus ventas en 2030 sean de vehículos a baterías. Junto con la versión de producción derivada de este concept, Skoda prevé presentar dos nuevos modelos eléctricos antes de 2026. Concretamente, serán un vehículo de pequeño tamaño y un SUV compacto. En términos económicos, la marca presenta un plan de inversión para los próximos cinco años de 5.600 millones de euros, para el desarrollo de su gama eléctrica, y más de 700 millones que se destinarán al proceso de digitalización.
Presentación de un nuevo lenguaje de diseño e imagen de marca
El nuevo lenguaje de diseño está caracterizado por sus luces, con una disposición en forma de T, tanto en la parte delantera como en la trasera. Así, en la parte frontal, las luces se disponen en dos líneas. Una línea luminosa horizontal, responsable de la iluminación diurna, recorre todo el frontal de lado a lado, e incluso se adentra algunos centímetros en las aletas delanteras. Esto mismo sucede en la parte trasera, donde la iluminación horizontal en este caso no es continua, ya que cede el espacio central del portón trasero a la inscripción Skoda, en mayúsculas, que sustituye al habitual logo de la marca.
Con este concept, Skoda también presenta su nueva imagen de marca, que provocará que su reconocible logo de flecha alada deje paso a la inscripción del nombre del fabricante en ambos frentes del producto
Ese motivo de diseño en T encuentra su réplica en la forma de los soportes para las cámaras que sustituyen a los espejos retrovisores tradicionales. También los tiradores de las puertas, enrasados en la carrocería, adquieren la forma de la vigésimoprimera letra de nuestro abecedario.
También es de nueva factura la calandra frontal que observamos en este Skoda Vision 7S, que en vez de contar con las habituales nervaduras horizontales de los productos de la marca checa actuales está enteramente cubierta por un cristal negro, que oculta los diferentes sensores instalados en el frente. Skoda ha denominado a este elemento Tech-Deck Face, y afirma que se trata de una evolución de las formas conocidas hasta ahora, y que pasará a ser el elemento reconocible del frontal de los productos de su catálogo.
Más abajo, en el frontal, observamos un llamativo paragolpes que acoge seis aberturas verticales, destinadas a canalizar el aire para la refrigeración de los frenos y otros componentes. Además, hay un elemento, también dispuesto de forma vertical, y en situación central, coloreado en naranja, que está habilitada para servir de gancho, ya que puede extraerse de su posición original, y que también incorpora un sistema para cortar la corriente desde el exterior, en caso de ser necesario durante un proceso de carga, por ejemplo. La parte inferior está cubierta con una plancha de aluminio para proteger los bajos ante cualquier impacto. En la parte trasera, son ocho las salidas de aire, y se repite también este elemento en naranja situado en el centro de ellas y con idénticas funcionalidades que el situado en la parte anterior.
Los paragolpes en los que se integran estos elementos están fabricados a partir de neumáticos reciclados, al igual que el interior del maletero. La marca afirma que se trata de un material duradero, fácil de limpiar y resistente a los rayones, a la vez que pone de manifiesto el enfoque sostenible en su fabricación.
El particular sistema de apertura de las puertas traseras aporta una visión del habitáculo mucho más espaciosa si cabe
Desde una vista lateral, destaca la limpieza de su diseño, con líneas suaves que aportan una imagen algo más orgánica que la habitual en tiempos recientes en la marca. También llaman la atención sus puertas, de apertura opuesta entre sí –las delanteras son convencionales y las traseras abren hacia atrás–, y que eliminan el pilar B, favoreciendo más si cabe la higiene estética en esta vista. Los pasos de rueda son de líneas rectas y están recubiertos por este mismo material mencionado anteriormente y que se obtiene a partir de neumáticos reciclados. Las llantas, de 22 pulgadas, apenas tienen aberturas para mejorar el rendimiento aerodinámico del vehículo.
También con este objetivo, el de mejorar su eficiencia aerodinámica, se incluye a su vez un spoiler trasero, que alarga el techo, el cual cae en línea descendente hacia la trasera. En esta parte, aparece un pilar D con forma triangular, que Skoda afirma que caracteriza al modelo, otorgándole una identidad distintiva.
Está construido sobre la plataforma MEB del grupo Volkswagen, optimizada para arquitecturas eléctricas. Monta una batería de 89 kWh de capacidad, con la que la marca estima que podrá recorrer 600 km entre cargas, según el ciclo WLTP. Puede admitir cargas de hasta 200 kW.
¿Es el habitáculo de un vehículo o una verdadera sala de estar?
En cuanto al interior del Skoda Vision 7S, aquí Skoda presenta su visión más futurista, ya que existe la posibilidad de cambiar su configuración con solo apretar un botón. La disposición de los asientos y de las pantallas se ajusta a la situación de sus ocupantes, que pueden optar por un modo Drive, para cuando se circula con él, o un modo Relax, para cuando se encuentra estacionado, independientemente de que se esté llevando a cabo o no el proceso de carga.
En el primero de ellos, el volante y el cuadro de instrumentos –digital, de 8,8 pulgadas– se encuentran en la posición requerida para poder circular por carretera. La pantalla central, de 14,6 pulgadas, se mantiene en posición vertical y muestra la información más relevante durante la conducción. En la segunda de las configuraciones, esta pantalla orientable adquiere una posición horizontal, para disfrutar del contenido audiovisual que decidan sus ocupantes, al tiempo que el volante y el cuadro de instrumentos se desplazan hacia adelante para ofrecer mayor espacio a su conductor. Además, los asientos de la fila delantera rotan hacia el centro del vehículo y reclinan sus respaldos, para permitir así una mejor visión de dicha pantalla por parte de quienes ocupen la segunda fila. Los respaldos de esta, por su parte, también se reclinan.
Añade numerosas soluciones modernas como superficies imanadas para permitir situar los teléfonos móviles u otros objetos –la marca menciona botellas o botiquines–, tanto en la parte delantera de la consola central como en los respaldos de estos asientos anteriores, para que sean utilizados por los ocupantes de los asientos de la segunda fila. Cabe mencionar que existe la posibilidad de utilizar el teléfono móvil como mando remoto del sistema de infoentretenimiento. La marca ha presentado también unas mochilas magnéticas que pueden ser fijadas en dichos respaldos.
La marca checa ha querido aclarar en la presentación de este concept que conserva mandos físicos para la gestión de alguna de las funciones, pese a que también cuente con numerosos mandos hápticos y táctiles en general
Esta consola central, que se extiende además a esta segunda fila de asientos, incluye en este punto una silla de bebé, situada en sentido opuesto a la marcha. Según la marca, este es el lugar más seguro para ella, en caso de accidente, al tiempo que permite que su joven ocupante sea vigilado en todo momento por quienes se sienten en estas plazas traseras. Como opción, incluye una cámara en el techo, sobre la segunda fila de asientos, para poder observar desde la pantalla central todo lo que acontezca en esta silla de bebé.
El enfoque sostenible en su fabricación tiene continuidad en el habitáculo, donde se utilizan cueros sintéticos para el recubrimiento de ciertas superficies –como la parte superior de los paneles de las puertas o el salpicadero– y tejidos elaborados a partir de poliéster reciclado –como el tapizado de los asientos, con costuras en forma de X–. Se combina el color oscuro de algunos elementos con otras partes en un tono más claro, reminiscente del verde mate de la carrocería.
Skoda continúa procurando encontrar un espacio diferenciado dentro del grupo Volkswagen, con productos como este Skoda Vision 7S. Al mismo tiempo, también ha querido revelar información acerca de sus planes respecto de otros modelos impulsados por motores de combustión. Así, durante el próximo año llegarán al mercado los nuevos Skoda Superb y Skoda Kodiaq, mientras que la renovación del Skoda Octavia habrá de esperar hasta 2024.
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David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS