Los fotógrafos espía cada día lo tienen más complicado, si de pillar infraganti se trata a los fabricantes. Las propias marcas publican fotos de sus coches camuflados durante las fases de pruebas, aprovechando el tirón que genera y creando expectación y si, también algo de publicidad. Todo tiene gato encerrado.
El último fabricante que ha explotado esta posibilidad es Mercedes, quien nos ha enseñado algunas fotos de su próximo retoño, aunque deberíamos decir la próxima reencarnación de uno de sus coches más míticos y carismáticos: el Mercedes SL. Ahora el nombre completo es Mercedes SL Roadster, por si alguien necesita una confirmación de su condición de descapotable y dos plazas. De todas formas, un roadster no es un descapotable biplaza sin más, debe reunir unas determinadas condiciones que, por lo general, el SL no tiene.
No quiere decir que sea mal coche, ni mucho menos, el Mercedes SL es uno de los descapotables biplaza más apreciados del mercado, siempre que no quieras un deportivo puro. El Mercedes SL está más cerca de ser un Gran Turismo, uno muy bueno, con mucha tecnología y mucha historia a sus espaldas.
Será mucho más deportivo de lo que ha sido hasta ahora
Para la próxima generación, esa condición más cerca a un Gran Turismo se potenciará todavía más, ya que Mercedes promete un coche más deportivo de lo que ha sido hasta ahora. Sin ir más lejos, compartirá muchas cosas con el Mercedes-AMG GT, tantas que podría decirse que es el mismo coche con otra carrocería y distinta puesta a punto.
La lista de elementos compartidos empieza en la plataforma, pasando por los motores, las suspensiones, el conjunto de la dirección y por supuesto, el sistema de hibridación suave a 48 voltios (para los seis cilindros). Importante esta última parte, ya que la electrificación se está posicionando como la mejor fórmula para cumplir con las normativas de emisiones, que además se premia en España con la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico.
Una de las cosas que ya sabemos con antelación, es que la nueva generación del Mercedes SL no tendrá motores V12. La gama mecánica tendrá los V8 biturbo que usa el AMG-GT en las versiones más potentes y la hibridación suave ayudará a rebajar las emisiones globales del modelo sin perder prestaciones y sin tener que recurrir a pesadas baterías. Sin embargo, no se debería descartar una versión híbrida enchufable, tal y como están las cosas con las emisiones.
Adiós al techo duro retráctil y arquitectura transaxle
La información facilitada por la marca apenas abarca más de 100 palabras, pero las fotos nos dejan algunas dudas en el aire que podrían cambiar por completo la fisionomía del descapotable alemán. Por ejemplo, la zona trasera estará inspirada en la del Mercedes-AMG GT con toda seguridad, con unos pilotos muy delgados y un culo respingón y de formas curvas y suaves. El frontal beberá de las mismas aguas que el resto de la gama Mercedes, con formas similares a las vistas en el Mercedes CLS o en el CLA, por poner los ejemplos que se nos vienen a la cabeza.
Mirando más detenidamente se puede ver como la zona de la capota tiene una cubierta diferente al resto, como un postizo que nos hace pensar en un techo de lona. Las últimas ediciones del SL, el R230 y el R231, haciendo uso de una capota metálica plegable, que se puso muy de moda durante unos años pero que con el paso del tiempo fue desechándose y nuevamente, se ha vuelto al techo flexible de tejido. No hay confirmación al respecto, tan solo es una suposición.
Tampoco tenemos información sobre arquitectura, motores o cajas de cambio, pero sabiendo que la plataforma y algunos propulsores se comparten con el AMG GT, no podemos pasar por alto que quizá adopte una configuración transaxle, con caja de cambios automática de doble embrague y ocho relaciones.
En estos momentos se están completando las pruebas en carretera abierta, pero el coche llegará a las calles a mediados de 2021. Se fabricará en Sindelfingen, en Alemania, junto al AMG GT.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS